La Titulación de Logopedia se crea en España en el año 1992 pero no es hasta el año 2003 cuando es considerada como una profesión sanitaria. Así lo contempla la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias (LOPS) que declara formalmente el carácter de profesión sanitaria, titulada y regulada, de la actividad de Logopedia, y que equipara a otras actividades como Enfermería, Fisioterapia, Podología u Óptica y Optometría.

Es por ello, que los logopedas, una vez terminados los estudios universitarios, tendrán su salida profesional fundamentalmente a nivel sanitario, ya sea en ámbito hospitalario o extrahospitalario, a nivel público o privado, pero siempre vinculados a las ciencias de la salud.

El logopeda es el profesional sanitario capacitado para la valoración, diagnóstico, tratamiento y prevención de las alteraciones del lenguaje, habla, voz, audición deglución y otras funciones orales no verbales. Contribuye a la recuperación de pacientes que presentan síntomas como alteraciones de la comunicación, la deglución y otros como afasias, disartrias, disfonías, sorderas o trastornos del lenguaje que acompañan a enfermedades psiquiátricas y degenerativas como la Enfermedad de Parkinson o la demencia tipo Alzheimer, entre otras. Aun así, la buena formación del logopeda supone adquirir conocimientos de otras áreas diferentes a la sanitaria como son la Pedagogía, la Lingüística o la Psicología entre otras.

 

Especialidades médicas relacionadas con la Logopedia

La adquisición de nuevos conocimientos tecnológicos y científicos en muchas especialidades médicas ha permitido entender aspectos de la comunicación antes desconocidos y crear un fuerte vínculo entre médicos y logopedas.

  • Existe una gran relación entre la Logopedia y los médicos especialistas en Otorrinolaringología ya que el diagnóstico y tratamiento de algunas enfermedades de la audición y de la voz supone la intervención y un trabajo en equipo entre estos profesionales. El entrenamiento auditivo del niño sordo, la rehabilitación en implantes cocleares, la recuperación de las disfonías, el entrenamiento vocal de los laringectomizados, son algunas de las patologías en las que interviene el logopeda a nivel terapéutico.
  • Existe también un gran vínculo entre la Neurología y la Logopedia. Son muy numerosas las enfermedades neurológicas, congénitas o adquiridas, con repercusiones logopédicas como las enfermedades neurodegenerativas, los ictus, los tumores cerebrales o los traumatismos craneoencefálicos, entre otras. Los logopedas son imprescindibles en la valoración y tratamiento de estos pacientes. No debemos olvidar mencionar el papel tan importante del logopeda en las alteraciones de la deglución tan frecuente en enfermos neurológicos.
  • La Psiquiatría debe contar con logopedas para intervenir terapéuticamente a enfermos que junto a las patologías mentales o de conducta, presenten alteraciones de la comunicación. Enfermedades como la esquizofrenia, el autismo o los trastornos de atención, tienen patrones atípicos de lenguaje que también se benefician de la intervención logopédica. Muy importante en esta dirección, es también la labor de los Psicólogos.
  • La Logopedia es también fundamental para Odontólogos, Ortodoncistas y Cirujanos maxilofaciales. Sus pacientes frecuentemente tienen asociadas alteraciones anatómicas de las cavidades resonadoras y los órganos articuladores que ocasionan síntomas como maloclusiones, alteraciones en la deglución, dificultad para articular los sonidos del habla y un cambio importante en las características de la voz. La intervención del logopeda actuando sobre las zonas dentofaciales resulta del todo imprescindible, pues favorece la mejoría de las funciones orofaciales, del habla y la recuperación de la voz.
  • La terapia miofuncional y la psicomotricidad son algunas de las técnicas de rehabilitación que el logopeda y el médico especialista en Rehabilitación pueden aplicar en casos de parálisis cerebral u otros trastornos motores que dificultan la producción de la voz, el habla o las funciones orales no verbales como la masticación, la succión, la respiración y la deglución.
  • La Pediatría ayuda a detectar problemas de succión o de deglución, observar la integridad de los órganos bucofonoarticulatorios y su funcionalidad, valorar el progreso de la adquisición de habilidades motoras como el habla o el lenguaje escrito y determinar la aparición de algunos otros trastornos, por ejemplo, de la fluencia.
  • La Geriatría se vincula firmemente a la Logopedia. El envejecimiento asocia alteraciones que precisan la intervención de logopeda, como son la presbiacusia, la presbifonía o la presbifagia. El aumento de la esperanza de vida supone que la figura del logopeda sea cada vez más demandada en esta especialidad.

 

Es importante potenciar y ampliar la formación clínica de los estudiantes de Logopedia. A nivel sanitario, es imprescindible que el logopeda forme parte del equipo multidisciplinar que interviene en la valoración y en el tratamiento rehabilitador de muchos pacientes. Actualmente se está mejorando en este sentido y la figura del Logopeda ya está presente en muchos hospitales de nuestra Comunidad. La población va haciéndose eco de las campañas de concienciación social que van surgiendo desde los Colegios Profesionales de Logopedas, desde las asociaciones de afectados y desde la propia Universidad con iniciativas como los Talleres de lenguaje y comunicación, la Jornada de puertas abiertas o la celebración del Día Internacional de la Logopedia.

El Rector, el Decano y los profesores que impartimos docencia en el Grado trabajamos para superar cada año la formación de nuestros estudiantes. Se está mejorando significativamente la formación práctica de nuestros alumnos y, además, los alumnos de Logopedia forman ya parte de la Academia de Alumnos Internos de la Facultad de Medicina, y por ello participarán en el manejo de pacientes neurológicos hospitalarios con problemas de la comunicación y/o deglución.

Sirvan estas líneas como presentación del plan de estudios del Grado en Logopedia de la Universidad de Valladolid con el que la Facultad de Medicina ofrece una formación integrada de todos aquellos aspectos básicos, metodológicos y especializados, teóricos y prácticos, que interesan a la prevención, la evaluación y la intervención en el lenguaje y la comunicación.

Nuestros alumnos, futuros logopedas y sin duda, excelentes y competentes profesionales, podrán contribuir en gran medida al estado de bienestar individual y de la sociedad.